Si no vives en el campo, este es sin duda el objeto más importante del kit de un gato, no debes elegirlo demasiado pequeño, de hecho, el gato, al crecer, podría considerarlo demasiado pequeño y por lo tanto hacer sus necesidades afuera (que sería desagradable).
Es mejor evitar la arena común y el aserrín (pueden desprender mal olor). También se recomiendan cajas de arena cerradas con dispositivos internos para absorber olores, que se cambian cada tres meses.