Enlechar un pequeño agujero con una espátula y masilla es bastante simple. Simplemente llene bien el agujero después de quitar la espiga (si está presente) extrayéndola con unos alicates o empujándola dentro del ladrillo con un destornillador.
Sin embargo, puede suceder que se formen agujeros grandes y en este caso el asunto se vuelve un poco complicado.
De hecho, antes de llenar, inserte una pequeña bola de papel muy comprimido y luego rellene.
En cualquier caso con estuco seco o después de unas horas, será bueno nivelar el estuco con una fina ventana de vidrio.
Estuco
Existen masillas preamasificadas disponibles comercialmente listas para usar (masilla francesa) o polvo que deben prepararse mezclándolas con agua.
En el último caso, la ventaja es que no se secarán y se retendrán con el tiempo.